'Dual Cure' facilita la transición a la tecnología LED UV.

Casi una década después de su lanzamiento, las tintas curables por LED UV se están adoptando a un ritmo acelerado en la industria de la impresión de etiquetas. Sus ventajas frente a las tintas UV de mercurio convencionales —un curado mejor y más rápido, mayor sostenibilidad y menores costes operativos— son cada vez más conocidas. Además, la tecnología es cada vez más accesible, ya que los fabricantes de prensas ofrecen una gama más amplia de lámparas de larga duración para sus líneas de producción.
Además, los convertidores tienen un mayor incentivo para considerar la transición a la tecnología LED, ya que los riesgos y costos asociados se están reduciendo. Esto se ve facilitado por la llegada de una nueva generación de tintas y recubrimientos de doble curado que pueden utilizarse tanto con lámparas LED como de mercurio, lo que permite a los convertidores adoptar la tecnología de forma gradual, en lugar de abrupta.
La principal diferencia entre una lámpara de mercurio convencional y una lámpara LED radica en las longitudes de onda que emiten para el curado. La lámpara de vapor de mercurio irradia energía en un espectro comprendido entre 220 y 400 nanómetros (nm), mientras que las lámparas LED tienen una longitud de onda más estrecha, entre aproximadamente 375 nm y 410 nm, con un pico alrededor de los 395 nm.
Las tintas LED UV se curan de la misma manera que las tintas UV convencionales, pero son sensibles a una longitud de onda de luz específica. Por lo tanto, se diferencian entre sí por el grupo de fotoiniciadores utilizados para iniciar la reacción de curado; los pigmentos, oligómeros y monómeros empleados son los mismos.
El curado UV LED ofrece importantes ventajas medioambientales, de calidad y seguridad frente al curado convencional. Este proceso no utiliza mercurio ni ozono, por lo que no se necesita ningún sistema de extracción para eliminar el ozono del entorno de la imprenta.
También ofrece eficiencia a largo plazo. La lámpara LED se puede encender y apagar sin necesidad de calentamiento ni enfriamiento, proporcionando un rendimiento óptimo desde el momento en que se enciende. No se necesitan persianas para proteger el sustrato cuando la lámpara está apagada.